El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) es un trastorno de salud mental que consiste en la experimentación de pensamientos recurrentes (obsesiones) que pueden dar lugar a comportamientos repetitivos (compulsiones). Se calcula que el 2,3% de los adultos de EE.UU. padecen TOC en algún momento de su vida, y la afección tiende a ser más común en las mujeres que en los hombres.
Estas obsesiones y compulsiones pueden ocupar una gran cantidad de tiempo, interferir con la capacidad de una persona para funcionar en su vida diaria y crear una angustia significativa. Aunque no se conocen las causas exactas, los factores genéticos, biológicos y relacionados con el estrés pueden desempeñar un papel. Existen tratamientos eficaces que incluyen medicamentos y técnicas de psicoterapia como la terapia cognitivo-conductual (TCC) y la terapia de exposición y prevención de respuesta (EPR).